jueves, 22 de diciembre de 2011

In Time


Vamos como transeúntes, con el pie puesto en el acelerador, corriendo a todas partes, algunos incluso dando tumbos; a veces sin rumbo y otros sin embargo, con un mapa casi inquebrantable.
No paramos ni un segundo, no observamos ni escuchamos, dejamos de saborear...y algunos de disfrutar.



Llega el día en que las marcas de la vida aparecen, los ojos entristecen, las fuerzas decaen, la mirada se pierde en el infinito.
El tiempo va despacio y tu pasos son otros, tu interés se ha roto y sin darte cuenta has dejado de ser quien eras. Te cuesta reconocer tu rostro, tu imagen ha envejecido y los años ya no perdonan un descuido.


Ciclos, etapas... 80 años de una vida que desaparece sin avisar, años que recuperarías; tiempo que pagarías y que ahora no tienes.
Tiempo, medida que desaprovechamos y un día anhelamos; 

¿qué harías cuando te faltaran los minutos, los segundos que te dan el aire, los latidos que te hacen sentir? 

Las formas serían otras, viviríamos al día deseando que no acabara, aprovechando cada resquicio; mirando, sonriendo, escuchando, comunicando... Saboreando cada cuerpo como si fuera la última vez... siendo mortales... disfrutando cada cosa en su tiempo.



Se mortal esta Navidad y aprovecha cada segundo; la inmortalidad por ahora es muy lejana; no dejas para el próximo año lo que podrías hacer en este.
Visita a la familia que tienes pendiente; come hasta hartarte degustado cada plato; baila, canta y ríe hasta que tu cuerpo no pueda más; viaja si puedes permitírtelo; coge ese avión y da una sorpresa a la mujer que quieres; come cada uva pidiendo el mayor de los deseos.

Hazlo como quieras, pero goza y aprovecha cada fecha como merece, como si fuera la última, así no habrá duda de que no malgaste tu tiempo. 



¡Felices Fiestas y Próspero Año a todos! 
Mis mejores deseos para el 2012